El estudio, llevado a cabo por un grupo de investigadores de la Universidad Thomas Jefferson de Filadelfia y liderado por la Dra. Karen Knudsen, ha demostrado la existencia de la ADN-PKcs, una proteína clave en el crecimiento y expansión de las células cancerosas. Esta proteína, reparadora del ADN, ayuda a mantener la estabilidad del ADN en las células tumorales y evita su auto-destrucción. Además, esta proteína modula el enzima Rho/Rac que permite el desplazamiento de las células cancerosas. Los resultados de esta investigación han sido publicados en la revista Cancer Cell.
Con el fin de bloquear la acción de la ADN-PKcs se ha sintetizado un fármaco, el inhibidor Celgene CC ADN-PKcs, que ha conseguido buenos resultados en el animal de experimentación y que ya esta siendo utilizado en ensayos clínicos preliminares. La biología molecular y el estudio de la genética tumoral están abriendo nuevas vías en la investigación y desarrollo de fármacos que, en un día no muy lejano, permitirán combatir, de manera muy eficaz, el cáncer de próstata.
Cancer Cell: www.cell.com/cancer-cell/fulltext/S1535-6108(15)00214-7